El fantasma sin cabeza

Ser trabajador de carreteras supone varios riesgos, entre asaltos, accidentes y demás, ellos pasan por más de un problema sobrenatural, era una noche como cualquiera, la costumbre por manejar de noche en esa pista ya me era familiar, por ese momento ya eran mas de las 2 de la mañana y la entrega de mi paquete era de carácter de urgencia, y para ese momento estaba retrasado, no me podía permitir atrasarme.


Hasta hace poco había pasado por un poblado rural, me sorprendió no ver ninguna alma a esa hora, todas las luces estaban apagadas, sin excepción, ni siquiera los postes de alumbrado público estaban encendidos, pasando ese poblado estaba una pendiente, la cual subí sin dificultad, llegando a la parte superior pude ver un cuerpo femenino haciéndome señales para darle un empujón, al parar con afán de hacerle ese favor note que era hermosa, no lo pensé dos veces y le permití subirse a mi costado, como todo hombre si me dan a un monumento de mujer, la primera idea seria aprovecharme de mi suerte, intente entablar conversación con la morena ardiente, pero ella me daba poca atención, intente varias cosas, hasta que me di por vencido, ya había pasado mas de 30 minutos con tan mala racha hasta que llegamos a un túnel oscuro en eso la fuerza de mis impulsos pudo mas que mi moral, y deposite mi mano derecha en una de sus piernas, al instante lo quite, ya que al contacto con mi mano, su pierna estaba helada, al dar las luces de un camión que estaba viniendo en sentido contrario al mío pude observar unos hermosos senos, un precioso cuello, pero no tenia cabeza, grite como nunca en mi vida había gritado, mientras ella poco a poco se acercaba a mi, agarro mi cuello y lo estiro hacia arriba, el dolor era insoportable, intentaba no perder el control del vehículo, pasando el túnel llegue a una zona que sabia que era camino recto y me acosté de lado para poder impactarle una sola patada y botarla fuera del camión.

Me coloque nuevamente en posición para manejar, al mismo tiempo que veía mi espejo retrovisor, viendo que el cuerpo sin cabeza rodaba en el pavimento, di un suspiro de alivio y pensé en agarrar la radio para informar que llegaría en un par de horas a mi destino, pero al depositan mi mano en el radio sentí un frio que recorría todo mi ser, mire hacia la dirección que estaba mi mano y vi el cuerpo a mi costado, en eso perdí el control de vehículo cayendo por el acantilado, en estos momentos soy otra alma que busca tu espiritu para saciar el dolor de mi ser atormentado, te espero, ven pronto para jugar juntos.